El sábado, 16 de junio, salimos el Grupo Geograns rumbo a
Peñíscola, donde íbamos a pasar el fin de semana. El motivo del viaje era,
principalmente, visitar las islas Columbretes. A la altura de Alcocebre paramos
en un restaurante de la carretera y aprovechamos para ir al servicio y tomar
algo. En el autobús, nos propuso Artemi que en lugar de ir directos a Peñíscola
, nos detuviésemos en Alcocebre y realizáramos
un rato de senderismo por un sendero cercano al mar. Así lo hicimos y,
mira por donde, a mi me salió una
ampolla en el pie derecho, cosa que no me había sucedido nunca a pesar de haber
hecho caminatas más largas y con cuestas. Seguramente fueron los zapatos, que
en otras salidas no los he llevado.
Después de la caminata, ya a mediodía, y con bastante calor nos fuimos a
Peñíscola, nos alojamos en el hotel Felipe II, nos asignaron la habitación y bajamos a comer.
Por la tarde se hizo la ruta de la Sierra de Irta, pero yo
no fui porque tenía molestias en el pie. Me fui a la playa y luego pasee por la
orilla del mar.
A la mañana siguiente a las 6 y media bajamos a desayunar y
nos fuimos al puerto. Alli embarcamos en una especie de golondrina y comenzamos
la navegación, que por cierto, duraba 3 horas.
Las Islas Columbretes son un archipiélago que se encuentra cercano
a Castellón, son de origen volcánico, son varios islotes, el que se visita es
el llamado “l`illa ”Grossa”. Allí se encuentra un faro, que en la actualidad
está automatizado. En el año 1975 se marchó el último farero. Hoy viven en la
isla cuatro personas que hacen turnos de quince días. La isla está llena de
gaviotas, alacranes y lagartijas. Antiguamente estaba llena de serpientes. Hay
también un pequeño cementerio en el que, según nos dijeron, solo hay niños.
Es una Reserva Natural y está protegida por la Consellería
de Medio Ambiente.
En la visita a la isla nos acompañaron dos técnicos de dicha
reserva.
Para acceder a tierra tuvimos que pasar del barco a una
lancha motora, que lo hicimos muy bien y nadie acabo en el agua. aunque luego
de la visita y cuando regresamos al barco, se tiraron al mar muchas personas y
lo pasaron estupendamente nadando y refrescándose, pues hacia bastante calor,
yo me quedé con las ganas pues no soy tampoco una nadadora experta y encima soy
bastante miedica.
Estuvimos allí un rato, comimos de picni y luego alrededor
de las 15,30 comenzamos el regreso hacia la costa.
Fue un día muy interesante y disfrutamos mucho, hubo muy
buen ambiente.Con esta excursión fuera de programa, se terminaron las salidas
hasta el curso que viene.
¡Feliz verano a todos!
MUY BUEN BLOG!! VOLVEREMOS!
ResponderEliminarJose Alapont, tu ex-alumno.